Se inició la ofensiva judicial para frenarla polémica licitación de la hidrovía
Habilitaron la feria para tratar las impugnaciones presentadas por una de las empresas extranjeras interesadas en el tema.
Los chispazos de la actual licitación para quedarse con el dragado y el señalamiento de la vía fluvial por la que circula el 80% de la producción de granos y subproductos se convirtieron en una profecía cumplida: un campo de batalla de billeteras desatadas, lobby, impugnaciones, presentaciones administrativas, judiciales, dictámenes y cuanto intento sea posible con tal de que se rediscutan los términos del llamado que vence a mediados de febrero.
La licitación para la hidrovía ya comenzó su batalla en la Justicia con las primeras impugnaciones.
Dos cuestiones importantes se sumaron en estos días, indica el diario La Nación en su edición de ayer. La primera es que la Procuración de Investigaciones Administrativas (PIA) recibió una presentación de uno de los interesados en competir y, por estas horas, trabaja contrarreloj para mirar cada detalle de la licitación a fin de realizar un informe y elevarlo al Poder Ejecutivo.
Un tema no menor: en épocas de Alberto Fernández como presidente, fue la PIA quien presentó un lapidario informe sobre el direccionamiento del proceso de licitación por entonces abierto y frenó aquel expediente.
Esos mismos técnicos miran un terreno administrativo conocido, donde se replican algunos de los reparos que entonces originaron aquella postura que empezó a partir de una solicitada publicada por la belga Dredging Internacional, la china CCCC, Compañía Sudamericana de Dragados (el nombre local de la belga Jan de Nul), Rodhe; Nielsen, junto a Emepa, y la holandesa Boskalis que se habían presentado. Tres de ellas fueron descalificadas y la única que quedó en carrera fue Jan de Nul. Pero todo se frenó.
La segunda cuestión, y nada menor, es que la Justicia en lo Contencioso Administrativo habilitó la feria para tratar una medida cautelar presentada por una de las empresas interesadas en la concesión por 30 años con opción a 30 más.
En ambos lugares hay un protagonista en común: la belga Dredging Internacional (DEME), la empresa que hizo ambas presentaciones.